Un dulce proyecto para impulsar el turismo
El Gremio de Confiteros pone en marcha una campaña para dar a conocer la riqueza pastelera de Asturias 

Isabel BALLINA

La idea es que los turistas se lleven un recuerdo goloso de su paso por Oviedo. Con esta premisa se pone en marcha la campaña «Oviedo dulce», organizada por el Gremio de Confiteros y el Ayuntamiento de Oviedo. La táctica será repartir en los congresos cajas de los dos dulces más conocidos de la ciudad, las moscovitas y los carbayones. «Se trata de impulsar el potencial cultural y social de la gastronomía de la región», señaló ayer José Ramón Pando, concejal de Turismo, durante la presentación del proyecto en el que colaborarán veintidós confiterías de Oviedo, que mostrarán los típicos dulces asturianos a los turistas.

La campaña, enmarcada dentro del plan de competitividad turística, tiene por objetivo «mostrar la riqueza pastelera de Oviedo», señala Manuel Antonio Menéndez, presidente del Gremio de Pasteleros Confiteros.

«En la región destacan los bombones, los bizcochos, los hojaldres, los carbayones, las moscovitas y las letizias», indicó Menéndez, para el que el Principado es «un referente nacional en la elaboración de pasteles y un importante punto gastronómico». «En los eventos siempre nos piden las recetas, pero esto es como la sidra, fuera de Asturias no sabe igual», comentó Menéndez.

Oviedo, «famosa por la elaboración de chocolates», tiene un importante pasado en pastelería. «La confitería Camilo de Blas fue pionera en la elaboración de los carbayones», explicó Menéndez. «Estos dulces -carbayones y moscovitas- tienen una gran proyección fuera de la región», añade. El plan de competitividad del turismo gastronómico de Asturias es «uno de los motores para hacer de Oviedo y de la región un destino turístico cultural», concluyó Manuel Antonio Menéndez.